ESTUDIO COLOCA A AGUASCALIENTES COMO UNO DE LOS MEJORES ESTADOS PARA INVERTIR EN MÉXICO

Gracias a las ventajas competitivas que ofrece Aguascalientes, inversionistas nacionales y extranjeros han manifestado su interés de invertir en esta entidad, especialmente por su excelente ubicación estratégica y su calificado capital humano, tal como lo establece el estudio “Nearshoring: Oportunidad que desafía a las entidades mexicanas”, realizado por el Instituto Mexicano de la Competitividad (IMCO).

En dicho análisis se ubica a Aguascalientes dentro de las 10 entidades del país con las condiciones más propicias para la atracción de empresas e inversión extranjera directa, sobre todo en materia de disponibilidad de personal altamente calificado, ya que tres de cada 10 personas económicamente activas tienen estudios universitarios.

Asimismo, expone que Aguascalientes es la segunda entidad del país con el mayor número de instituciones de educación superior por cada millón de habitantes, lo que se suma al impulso que da el Gobierno del Estado al Modelo Dual, como una estrategia efectiva para fortalecer la vinculación escuela-empresa y responder así a las necesidades del mercado laboral.

De igual forma, el uso de nuevas tecnologías, los avances en la implementación de la Industria 4.0 y la adopción de nuevos esquemas de productividad hacen de Aguascalientes un lugar atractivo para hacer negocios y asegurar el éxito de los inversionistas.

Otra de las ventajas que ofrece esta entidad es su estratégica ubicación geográfica, que la convierte en un importante centro logístico para la distribución de mercancías, ya que se encuentra en el centro del país, lo que permite hacer llegar los productos de forma rápida y oportuna a otras entidades de la República.

Cabe destacar que dicho estudio que se realizó en colaboración con la Fundación Friedrich Naumann, analiza 15 indicadores socioeconómicos relacionados con el mercado laboral, la disponibilidad de insumos básicos, la infraestructura y el marco regulatorio, con el fin de evaluar el nivel de preparación que tiene cada entidad federativa para aprovechar las oportunidades generadas por el nearshoring, que es una práctica mediante la cual las empresas mudan su cadena de producción de un país a otro para disminuir tiempos y costos.